Alphabet, propietaria de Google, podría verse obligada a vender parte de su negocio de tecnología publicitaria. Esto porque ha sido acusada por los reguladores de la Unión Europea por tener prácticas anticompetitivas.
Esta sería la amenaza con la sanción regulatoria más severa a la que se ha enfrentado, pues podría resultar en una multa de hasta 10% de los ingresos globales anuales de Google, de acuerdo con Reuters .
De acuerdo con la Comisión Europe a, después de dos años desde que inició la investigación, apelan a que Google tiene comportamientos para favorecer sus propios servicios de publicidad.
Esto representaría un golpe duro para Google, pues sus servicios de publicidad se tratan de su mayor generador de ingresos, representando el 79% de los ingresos totales el año pasado.
De acuerdo con su reporte anual de 2022 , incluidos los servicios de búsqueda, anuncios de YouTube, Google Ad Manager, AdMob y AdSense, ascendieron a 76,048 millones de dólares.
Google tiene unos meses para responder a los cargos. También puede solicitar una audiencia cerrada ante altos funcionarios de competencia de la Comisión y sus contrapartes nacionales antes de que la UE emita una decisión en un proceso que podría llevar un año o más. La empresa también podría llegar a un acuerdo ofreciendo soluciones más sólidas que las propuestas anteriormente.