Mazda está dando un paso hacia el segmento premium con el lanzamiento del CX-90. Aunque inicialmente se consideraba como un reemplazo del CX-9, el CX-90 representa un cambio significativo en términos de plataforma, trenes motrices, equipamiento y precio. Con este nuevo modelo la marca japonesa ahora busca atraer a clientes que buscan una experiencia de conducción más sofisticada.
El nuevo CX-90 fue diseñado y desarrollado específicamente para el mercado estadounidense, donde el segmento de las camionetas grandes de tres filas de asientos goza de una gran demanda y rentabilidad. Aunque Mazda ya tenía presencia en este segmento con su modelo CX-9, no lograba competir en el segmento debido a que no ofrecía el espacio adecuado y las características que demandaba el mercado. Pero el nuevo CX-90 marca un cambio respecto al CX-9.
Nueva plataforma, nuevo motor
Para empezar, el modelo está montada sobre la última plataforma de motor longitudinal de Mazda, denominada “Large”. Emilio López, gerente de producto de Mazda en México, detalló que esta plataforma admite una variedad de trenes motrices, entre los que se encuentra un motor de seis cilindros en línea turboalimentado de 3.3 litros, que genera 340 caballos de fuerza y 369 libras-pie de torque, complementado con un sistema mild-hybrid de 48 voltios.