A medida que se acercan las elecciones del 5 de noviembre, Donald Trump intensifica su cortejo al voto latino con su iniciativa “Latinoamericanos por Trump”, destacando la disminución del desempleo hispano a niveles récord durante su administración. Con un apoyo creciente entre los latinos, muchos votantes se han sentido atraídos por las políticas económicas de Trump, que prometen controlar la inflación y mejorar la seguridad fronteriza, a pesar de que las estadísticas muestran que las tasas de desempleo bajo Biden son marginalmente más bajas.
Mientras tanto, la campaña de Kamala Harris lucha por recuperar el terreno perdido entre los votantes latinos, quienes han estado migrando hacia los republicanos. Harris, con un 59% de apoyo en esta comunidad, se enfrenta a un desafío significativo para revertir esta tendencia.