El filme “28 Años Después”, dirigida por Danny Boyle y Alex Garland, se ha convertido en la película más cara jamás filmada con smartphones. El rodaje, que ya ha concluido, utilizó principalmente iPhone 15 Pro Max, adaptados con lentes DSLR y otros accesorios. Con un presupuesto de 75 millones de dólares, esta tercera entrega de la saga de infectados rompe un récord por su innovadora elección tecnológica.
Aunque no se han revelado muchos detalles de la trama, se espera que “28 Años Después” esté ambientada casi tres décadas después de la pandemia del virus de la rabia, que convirtió a los infectados en seres violentos. El uso de iPhones le otorga una estética singular, recordando la decisión de “28 Días Después” (2002), que fue filmada con la entonces moderna cámara digital Canon XL-1.
Este enfoque tecnológico busca ofrecer una estética única, alejándose de las convenciones de Hollywood, mientras sigue la tradición de la saga de explorar nuevas formas de narración visual.