La policía de Queensland ha lanzado una búsqueda internacional para localizar a un hombre de 33 años acusado de arrojar café hirviendo a un bebé de 9 meses en un parque de Brisbane, Australia. Luka, el bebé, sufrió quemaduras graves en su rostro y cuerpo, mientras que el sospechoso logró huir del país antes de que las autoridades pudieran arrestarlo. El ataque ocurrió el 27 de agosto mientras la familia del menor disfrutaba de un picnic.
El sospechoso, un trabajador itinerante, habría tomado medidas de contravigilancia para evitar su captura, saliendo de Australia poco después del incidente. Las autoridades trabajan en conjunto con agencias internacionales para dar con su paradero. Mientras tanto, la familia de Luka, devastada por el ataque, continúa buscando respuestas y apoyo durante la recuperación del bebé.