El papa Francisco expresó su profunda preocupación por el devastador incendio forestal que ha asolado Grecia, especialmente en la región de Ática, cerca de Atenas. En su discurso en la plaza San Pedro, el pontífice lamentó los “inmensos daños materiales” y el “desastre medioambiental” causado por el siniestro, que ha quemado aproximadamente 10 mil hectáreas y ha llevado a la evacuación de decenas de miles de personas. Francisco destacó las “penurias terribles” que enfrentan los afectados y aseguró sus oraciones por las víctimas y heridos, así como su cercanía con quienes sufren esta grave tragedia.
El incendio, el más devastador del año en Grecia, ha causado la muerte de al menos una persona y ha arrasado con viviendas, negocios, vehículos y vegetación.
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