Felipe VI y la reina Letizia encabezaron una misa en la catedral de Valencia en honor a las 222 personas fallecidas durante las inundaciones del pasado 29 de octubre. Aunque los monarcas recibieron muestras de apoyo por su empatía con los afectados, la ceremonia generó polémica por la ausencia inicial de familiares de las víctimas, quienes fueron incluidos tras habilitarse transporte por parte del Arzobispado.
El presidente Pedro Sánchez no acudió al evento, ya que el Gobierno planea un homenaje estatal en fecha por definir. Mientras tanto, las autoridades siguen buscando a las cuatro personas desaparecidas en la tragedia, en un esfuerzo coordinado que mantiene la atención en las zonas afectadas.