El miércoles 4 de diciembre, Cuba experimentó un apagón masivo, el tercero en dos meses, debido a una falla en la Central Termoeléctrica Antonio Guiteras, ubicada en la provincia de Matanzas. La desconexión afectó a todo el país, y la Unión Eléctrica informó que se está trabajando en la restauración del servicio, aunque no especificó cuándo se restablecería la energía. Este apagón se suma a los recientes problemas energéticos, incluyendo los causados por los ciclones Oscar y Rafael.
La crisis energética de Cuba se debe a la falta de combustible para generar electricidad y a las fallas en las envejecidas infraestructuras. Este problema ha generado constantes cortes de luz, especialmente en horas pico, afectando la vida diaria de los ciudadanos. La situación se ve agravada por la crisis económica que atraviesa el país, con desabastecimiento de alimentos y combustibles, además de un aumento en la migración hacia Estados Unidos y otros destinos.