Fuertes lluvias e inundaciones azotaron California este fin de semana, dejando una persona fallecida en Sonoma y causando daños significativos en carreteras y viñedos de Windsor. Las tormentas, provocadas por un “ciclón bomba”, también afectaron al noroeste del Pacífico, donde miles de hogares siguen sin electricidad tras intensos vientos y precipitaciones.
En la Sierra Nevada, se esperan hasta 1.2 metros de nieve y ráfagas de 88 km/h, mientras que el clima invernal podría extenderse al noreste del país durante el Día de Acción de Gracias, complicando desplazamientos. Las lluvias, aunque desastrosas, han ayudado a aliviar la sequía en algunas regiones afectadas.