Más de 60 personas fueron detenidas en Ámsterdam tras los ataques contra hinchas israelíes del Maccabi Tel Aviv, que viajaron a la ciudad para un partido de la Europa League contra el Ajax. Los disturbios, ocurridos en varias zonas de la ciudad, dejaron decenas de heridos y cinco hospitalizados, aunque todos ya han sido dados de alta. Las autoridades neerlandesas, incluyendo al primer ministro Dick Schoof, condenaron los hechos, calificándolos de “ataques antisemitas”, y confirmaron que están investigando los incidentes.
Los ataques ocurrieron después de que hinchas del Maccabi Tel Aviv protagonizaran altercados y lanzaran consignas racistas, lo que intensificó las tensiones con manifestantes propalestinos. En respuesta, la alcaldesa de Ámsterdam, Femke Halsema, movilizó a la policía antidisturbios para controlar los enfrentamientos, mientras que el presidente israelí, Isaac Herzog, y el rey de los Países Bajos, Willem-Alexander, también expresaron su rechazo.