La industria automotriz en México sigue de cerca los próximos anuncios de Donald Trump, quien es el virtual presidente electo de Estados Unidos. Durante su campaña, Trump advirtió que, de llegar al poder, podría imponer aranceles a los vehículos producidos en México y exportados a Estados Unidos.
Odracir Barquera, director general de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), señaló que México se está preparando para la revisión del T-MEC, el tratado comercial que une a los países de América del Norte.
“Ya conocemos los resultados de las elecciones en Estados Unidos. Lo importante es que, una vez que Trump tome posesión a finales de enero, podamos ver qué tipo de anuncios hará. Es fundamental entender qué medidas busca implementar para definir la estrategia de negociación”, expresó Barquera en una conferencia de prensa.
El representante de la AMIA confía en que la Secretaría de Economía, que liderará las conversaciones con Estados Unidos y Canadá, representará adecuadamente los intereses de México. La dependencia mantiene un diálogo constante con la industria automotriz para asegurar que las demandas del sector se consideren en cualquier ajuste al tratado.
“Para la revisión del tratado, es clave conocer quiénes encabezarán el proceso desde Estados Unidos: quiénes estarán al frente de la Oficina del Representante Comercial (USTR), del Departamento de Comercio y de la Comisión de Comercio Internacional, así como la posible nueva composición del Congreso estadounidense”, añadió Barquera.
Actualmente, México es el mayor proveedor de autopartes para Estados Unidos, con una participación del 43.1%, seguido de Canadá con el 10% y China con el 7.7%. Esta integración fortalece a la región, destacó Julio Galván, gerente de estudios económicos de la Industria Nacional de Autopartes, quien subrayó el rol clave del T-MEC en esta colaboración.