Sammy Basso, el biólogo italiano conocido por ser el paciente con progeria más longevo, falleció a los 28 años este sábado 5 de octubre, informó su familia.
Basso, quien padecía el síndrome de Hutchinson-Gilford, una rara enfermedad genética que causa envejecimiento prematuro, fue un referente en la concienciación sobre esta condición. El activista murió de forma inesperada mientras cenaba con su familia en un restaurante de Treviso.
Graduado en Ciencias Naturales, dedicó su tesis a investigar terapias para frenar la enfermedad y fue nombrado Caballero por el presidente Sergio Mattarella en reconocimiento a su labor científica y social.
También fundó la Asociación Italiana Progeria Sammy Basso para apoyar la investigación y ayudar a otras familias afectadas. La progeria, causada por una mutación en el gen LMNA, produce una proteína defectuosa (progerina) que acelera el envejecimiento, afectando principalmente al sistema cardiovascular y provocando complicaciones fatales en la juventud.
Pese a todo, Basso superó las expectativas de vida típicas de esta enfermedad, pues la mayoría de los pacientes fallecen en la adolescencia o a principios de la veintena. Su legado en la ciencia y la lucha por visibilizar la progeria seguirá inspirando a muchos.