Tres años después de haber compartido el oro olímpico en salto alto en Tokio 2020, el qatarí Mutaz Essa Barshim y el italiano Gianmarco Tamberi protagonizaron nuevamente un acto de empatía y compañerismo en París 2024.

En pleno clasificatorio, celebrado este miércoles en el Stade de France, Mutaz Essa Barshim sufrió una fuerte molestia durante uno de sus saltos, no pudo completar el intento y se tiró al suelo para ser asistido por los servicios médicos. Fue en ese momento cuando el europeo, otra vez mostrando su nobleza, se acercó rápidamente a su amigo y competidor para verlo, escena que captó la atención de la audiencia.

Barshim sintió un dolor en el gemelo que lo forzó a recibir atención médica en medio de la competencia, mientras que Gimbo, como es conocido en el ambiente, manipuló la zona afectada de su compañero en un gesto lleno de solidaridad.

Pese a la molestia, Barshim logró superar los 2.27 metros en su segundo intento. Tamberi, por su parte, tuvo serios problemas para alcanzar alturas mayores debido a su reciente enfermedad. El italiano sufrió de cálculos renales y había compartido en redes sociales una foto hospitalizado tan solo unos días antes del evento.

Esta no es la primera vez que ambos atletas protagonizan una de las historias más emotivas del atletismo. En los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, Barshim y Tamberi decidieron compartir la medalla de oro tras alcanzar ambos los 2.37 metros y elegir no seguir compitiendo y optar por el empate, lo que simbolizó el verdadero espíritu deportivo. La imagen de ambos hablando con uno de los jueces para acordar compartir el oro dio la vuelta al mundo y se convirtió en un ícono de los Juegos.