El primer ministro de Rumania, Marcel Ciolacu, anunció que no asistirá a la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de París 2024 en modo de protesta por el “trato indigno” que recibieron dos atletas de su país durante la competencia de gimnasia artística.
“He decidido no participar en la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de París, después de la situación escandalosa del torneo, cuando trataron a nuestros deportistas de una manera absolutamente indigna“, aseguró Ciolacu en la red social Facebook.
El primer ministro aludió a las finales individuales de gimnasia del lunes 05 de agosto, donde la rumana Maria Barbosu quedó en tercer lugar en el tablero, con 13.700 puntos, por detrás de la brasileña Rebeca Andrade (14.166) y la estadounidense Simone Biles (14.133).
Después del anuncio de los resultados, la estadounidense Jordan Chiles reclamó la revisión de sus puntos y tras la decisión de los jueces quedó tercera con 13.766 puntos, quitando así la medalla de bronce a Rumania.
Barbosu, de 18 años, ya celebraba el bronce e incluso ondeaba la bandera rumana en el Arena Bercy antes de ser relegada al cuarto puesto.
Mientras, Sabrina Maneca-Voinea gimnasta de 17 años originaria de Rumania, también pidió la revisión de sus puntos, pero los jueces rechazaron su reclamo.
Según Ciolacu, millones de espectadores de todo el mundo se quedaron conmocionados debido a “la horrible escena“, que es una señal de que “algo no va bien en la forma en que se organiza esta competición”.
El primer ministro de Rumania destacó que las dos deportistas rumanas recibirán trato como medallistas por el Estado, además, la federación rumana anunció su intención de presentar dos quejas formales ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo.