Tras la reciente volatilidad en los mercados financieros globales, México ha sufrido una depreciación significativa, cayendo un 1.2% frente al dólar y afectando el principal índice de la Bolsa Mexicana de Valores, que también registró una baja.
Para mitigar esta volatilidad, analistas destacan el papel crucial del Banco de México y del gobierno en proyectar estabilidad y confianza en los mercados. Según expertos, la comunicación efectiva del banco central es fundamental para manejar la volatilidad del tipo de cambio. Además, el desempeño de Pemex y los flujos de remesas serán factores críticos en la estabilidad económica del país, especialmente en un contexto de posible recesión en Estados Unidos.