El fabricante de aviones Boeing aceptó declararse culpable de un delito de conspiración para cometer fraude con el fin de resolver una investigación del Departamento de Justicia de Estados Unidos relacionada con dos accidentes mortales del 737 MAX, aseguró el Gobierno en una presentación judicial a última hora ayer.
La declaración, que aún requiere la aprobación de un juez federal, convertiría al fabricante de aviones en un delincuente convicto. Al mismo timepo, Boeing deberá pagar una multa penal de 243.6 millones de dólares, dijo el Departamento de Justicia (DoJ, por sus siglas en inglés) en un documento presentado ante un tribunal federal en Texas que proporcionó una visión general del acuerdo en principio.
La acusación se relaciona con dos accidentes de 737 MAX en Indonesia y Etiopía durante un período de cinco meses en 2018 y 2019 que mataron a 346 personas y llevaron a las familias de las víctimas a exigir que Boeing se someta a un juicio.
Una declaración de culpabilidad amenaza potencialmente la capacidad de la compañía para obtener lucrativos contratos gubernamentales con entidades como el Departamento de Defensa de Estados Unidos y la NASA, aunque podría solicitar exenciones. Boeing quedó expuesta a un proceso penal después de que el Departamento de Justicia determinara en mayo que la empresa había incumplido un acuerdo de 2021 relativo a los accidentes mortales.
Sin embargo, la declaración de culpabilidad evita a Boeing un juicio polémico que podría haber expuesto muchas de las decisiones de la empresa que condujeron a los accidentes mortales del avión MAX a un escrutinio público aún mayor. También facilitaría a la compañía, que tendrá un nuevo consejero delegado a lo largo de este año, intentar seguir adelante mientras busca la aprobación para su planeada adquisición de Spirit AeroSystems SPR.N.
Un portavoz de Boeing confirmó que había “llegado a un acuerdo de principio sobre los términos de una resolución con el Departamento de Justicia”.
El fabricante de aviones también acordó invertir al menos 455 millones de dólares en los próximos tres años para reforzar sus programas de seguridad y cumplimiento de la normativa, según el expediente.
El Departamento de Justicia designará a un supervisor externo para vigilar el cumplimiento de las normas por parte de la empresa. El supervisor tendrá que presentar públicamente al tribunal informes anuales sobre los progresos de la empresa. Boeing también cumplirá un periodo de prueba, durante el cual se compromete a no infringir ninguna ley, hasta el final del mandato de tres años del supervisor.
El 30 de junio, el Departamento de Justicia ofreció a Boeing un acuerdo de culpabilidad y le dio de plazo hasta el final de la semana para aceptarlo o enfrentarse a un juicio por conspiración para defraudar a la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) en relación con una función de software clave vinculada a los accidentes mortales.