Corea del Norte disparó un misil balístico no especificado hacia el mar de Japón, citando al estado mayor conjunto de Corea del Sur. Este lanzamiento se produce días después de que Pyongyang fracasara en el intento de colocar un satélite espía en órbita.
Las fuerzas de seguridad y la oficina del primer ministro de Japón también confirmaron el lanzamiento, señalando que Corea del Norte lanzó lo que parece ser un misil balístico y que estaban en proceso de recopilar más información. Este acto incrementa la tensión en la región y sigue una serie de pruebas y desarrollos en tecnología de misiles y satélites por parte de Pyongyang, subrayando las continuas preocupaciones sobre la estabilidad y la seguridad en el noreste de Asia.