Una violenta tromba azotó las regiones Norte y Carbonífera de Coahuila y el sur de Texas, dejando un saldo trágico de cinco muertos. La intensa tormenta, acompañada de fuertes ráfagas de viento, lluvias torrenciales y granizo, provocó apagones que afectaron a casi 300 colonias.
En medio de la tragedia, se reportaron accidentes mortales, incluyendo el atropellamiento de Israel Rivera Villanueva, trabajador de Simas, y un choque frontal en la carretera a Eagle Pass entre una camioneta Chevrolet Tahoe y un camión de mensajería, que dejó cuatro muertos y dos heridos graves en la vía federal 57.
Ante la devastación, autoridades municipales realizaron labores de evaluación de daños desde la Central de Bomberos, estableciendo el edificio como refugio temporal y coordinando cuadrillas de apoyo para el retiro de árboles y cables peligrosos.
Protección Civil emitió alertas sobre la formación de un tornado a 27 kilómetros de Zaragoza, aunque no se confirmaron daños adicionales hasta el momento.
Los estragos de la tormenta fueron evidentes en cada rincón, con árboles centenarios arrancados de raíz, postes de luz doblados y estructuras metálicas retorcidas, sumiendo a más del 70% de las colonias en la oscuridad.