El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, criticó duramente el asalto a la embajada de México en Quito por parte de autoridades ecuatorianas, calificándolo de “autoritario” e incluso comparándolo con regímenes pasados como el de Augusto Pinochet en Chile. López Obrador atribuyó el incidente a un conflicto interno entre el gobierno de Daniel Noboa y políticos afines al expresidente Rafael Correa.
El mandatario mexicano denunció que el asalto a la embajada violó el derecho de asilo, la soberanía y las normas internacionales, anunciando que México presentará una denuncia ante la Corte Internacional de Justicia. Además, agradeció el apoyo de la comunidad internacional y destacó la solidaridad expresada por varios países, incluyendo Bolivia y Nicaragua.