El multimillonario Elon Musk, propietario de la red social X, enfrenta una investigación y una multa diaria de 100 mil reales por perfil, ordenadas por el juez Alexandre de Moraes del Tribunal Supremo de Brasil. Estas medidas se dan en el contexto de una investigación sobre milicias digitales. Musk respondió atacando al juez en su propia plataforma, pidiendo su dimisión y prometiendo no acatar las decisiones judiciales del Tribunal Supremo.
La disputa entre Musk y el Tribunal Supremo se intensifica, con el juez Moraes ordenando una investigación contra el propietario de X por presunta obstrucción de justicia y su papel en las milicias digitales. A pesar de las amenazas de Musk de eliminar restricciones y cerrar operaciones en Brasil, las cuentas bloqueadas por órdenes judiciales permanecen inactivas, mientras la empresa enfrenta la presión de respetar las decisiones judiciales.