Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Nuevo León, instaló “topes de la memoria” afuera de la Fiscalía General de Justicia del Estado, como un recordatorio permanente a las autoridades sobre personas quien se desconoce aún su paradero, cifra que hasta el momento suma más de 6 mil.
Los topes de plástico, llevan por encima una placa con el nombre y fecha de desaparición de la víctima. El primer tope en colocarse fue el de Roy Rivera Hidalgo, desaparecido el 11 de enero del 2011 a manos de personas vestidas con ropa de una presunta corporación de seguridad.
El objetivo de estas primeras 40 placas es que puedan ocasionar un tropiezo al caminar, y así lograr que el peatón lea la placa que recuerda el nombre de la víctima desaparecida.