En una ceremonia celebrada en Santiago, el gobierno de Chile entregó la presidencia “pro tempore” de la Alianza del Pacífico a Perú, poniendo fin al conflicto entre el país andino y el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. La canciller peruana, Ana Cecilia Gervasi, destacó la renovación del compromiso por la integración regional para enfrentar desafíos compartidos. La Alianza del Pacífico representa el 41% del PIB de América Latina y cuenta con un mercado de más de 230 millones de personas.
El conflicto se originó cuando el presidente López Obrador se negó a entregarle la presidencia temporal a Perú, calificando a la mandataria Dina Boluarte como “usurpadora”. Boluarte asumió el cargo como sucesora del encarcelado Pedro Castillo, quien enfrentó una votación legislativa de destitución antes de su detención en diciembre pasado. Las tensiones entre México y Perú llegaron a tal punto que Perú declaró a López Obrador “persona non grata”. La presidencia temporal de Chile en la Alianza del Pacífico allanó el camino para resolver este conflicto diplomático.