La Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA) dio inicio en Washington, Estados Unidos, con el objetivo de abordar los desafíos en Nicaragua y Haití, así como fortalecer la responsabilidad democrática y promover los derechos humanos.
El secretario general de la OEA, Luis Almagro, destacó que la región históricamente ha enfrentado desigualdades que generan discriminación y corrupción, y que se convierten en un caldo de cultivo para el autoritarismo.
Durante la inauguración, el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, extendió una invitación a los países a unirse a la preparación de la cumbre mundial de la paz para poner fin a la invasión rusa en Ucrania. A pesar de las críticas hacia la naturaleza del foro, Almagro enfatizó la importancia de mantener un espacio plural de discusión.
La 53ª edición de la Asamblea General de la OEA se desarrollará hasta el viernes y se lleva a cabo en un contexto marcado por un giro hacia la izquierda en América Latina.